martes, 22 de febrero de 2011

Paula era una persona que poseía el don de hacer del amor el arte del desencuentro. Siempre tenía a mano una técnica, una estrategia, un esquive burlón para escapar de aquellos a los que, previamente, les había dado todas las coordenadas para que llegasen a la encrucijada de tener que confesarle sus sentimientos… o elegir el camino del silencio. Pero como ambas opciones llevaban a un mismo fin, todos los candidatos veían destrozadas -tontas mariposas contra el radiador del auto- las ilusiones de una verdadera pasión, o de unos días de placer, o de una noche de lujuria.


Qiero aclarar ante todo q esta entrada no es Mia, q es de otra persona. Pero me senti Mui identificada. La verdad me Gusto mucho y decidi hacer tributo a el escritor poniendola. :)

1 comentario:

Bartu Juan dijo...

Matamariposas! :D Buena comparación.

Saludos: http://bartwritesit.blogspot.com/